Ben Cohen, cofundador de los helados Ben & Jerry's, fue arrestado el pasado 15 de mayo por la policía del Capitolio luego de interrumpir la audiencia del Comité de Salud, Educación, Trabajo y Pensiones del Senado, donde testificaba Robert F. Kennedy Jr, secretario de Salud y Servicios Humanos, para protestar contra la ayuda militar de Estados Unidos a Israel y las condiciones humanitarias en Gaza.
Ciudad de México, 7 de junio (SinEmbargo).- A principios de mayo, Ben Cohen, cofundador de Ben & Jerry's, y otros manifestantes interrumpieron una reunión del comité de salud del Senado. Mientras era escoltado por personal de seguridad, Cohen declaró: "El Congreso está financiando el bombardeo de niños pobres en Gaza y lo está pagando expulsando a niños pobres de Medicaid en Estados Unidos".
Cohen nació el 18 de marzo de 1951 en Brooklyn, Nueva York y creció en Merrick, Long Island. Ben Cohen fundó en 1977 junto a Jerry Greenfield la empresa Ben & Jerry's luego de completar un curso por correspondencia para hacer helados. Actualmente, Ben & Jerry's pertenece a Unilever, que a lo largo de la segunda mitad del siglo XX se hizo de esta empresa y de otras como Lipton, Brooke Bond, Chesebrough-Ponds, Best Foods, Alberto-Culver y Dollar Shave Club.
En días pasados, la junta directiva independiente de Ben & Jerry's calificó el conflicto de Gaza de genocidio. "Apoyamos a todos los que alzan la voz contra el genocidio en Gaza, desde los firmantes de peticiones hasta los manifestantes callejeros y quienes corren el riesgo de ser arrestados", declaró en un comunicado al que tuvo acceso The Wall Street Journal. "Cuando la humanidad está en juego, el silencio no es una opción; ahora es el momento de decir la verdad al poder".
La declaración provocó la ira de Unilever, la empresa matriz de Ben & Jerry's, con quien la marca de helados ha luchado durante años por el activismo social de la junta directiva independiente de Ben & Jerry's, en particular por sus posturas públicas sobre Israel y los territorios palestinos. Un representante de Unilever declaró el jueves de la semana pasada que los miembros de la junta directiva de la misión social de Ben & Jerry's "no representan a nadie más que a sí mismos".
No obstante, según una cláusula inusual del acuerdo de adquisición que Unilever firmó con Ben & Jerry's en el año 2000, reseña The Wall Street Journal, la junta directiva independiente de la marca conserva la capacidad de tomar decisiones sobre su misión social y marketing.
Unilever ha criticado en documentos judiciales la decisión de la junta directiva independiente de "continuar involucrando a Ben & Jerry's y a Unilever en el conflicto israelí-palestino, uno de los temas más divisivos y polarizadores de nuestro tiempo".
La relación de Unilever con la junta directiva independiente de Ben & Jerry's se tensó en 2021, cuando Ben & Jerry's suspendió la venta de sus productos en los asentamientos judíos de Cisjordania ocupada por Israel y presentó una demanda contra Jerusalén Este, alegando que vender allí era incompatible con sus valores.
Ese año, Ben Cohen y Jerry Greenfield escribieron en The New York Times: “Somos los fundadores de Ben & Jerry's. También somos judíos orgullosos. Es parte de nuestra identidad y de cómo nos hemos identificado a lo largo de nuestra vida. A medida que nuestra empresa comenzó a expandirse internacionalmente, Israel fue uno de nuestros primeros mercados extranjeros. En aquel entonces, y hoy, apoyamos al Estado de Israel. Pero es posible apoyar a Israel y oponernos a algunas de sus políticas, al igual que nos hemos opuesto a las políticas del gobierno estadounidense. Por ello, apoyamos firmemente la decisión de la empresa de poner fin a sus operaciones en los territorios ocupados, que la mayoría de la comunidad internacional, incluidas las Naciones Unidas, ha considerado una ocupación ilegal”.
Como resultado, muchos países determinaron que Unilever infringía sus leyes antiboicot, desinversión y sanciones. Esto dio lugar a demandas y sanciones contra Unilever, y a la desinversión de cientos de millones de dólares en acciones de Unilever, según declaró Unilever en una presentación legal en marzo.
The Wall Street Journal señala cómo Unilever tuvo que vender el negocio de Ben & Jerry's en Israel a su distribuidor israelí, lo que permitió que las ventas de la marca de helados continuaran en todo Israel y Cisjordania. Ben & Jerry's demandó entonces a su propia empresa matriz, alegando había violado el acuerdo de adquisición que le otorgaba la responsabilidad principal sobre su misión social. Unilever ahora está planeando escindir sus activos de helados, como parte de una estrategia para simplificar Unilever e impulsar el crecimiento de la empresa.
Un activista contra la guerra
En marzo de 2023, Ben & Jerry's enfrentó un boicot luego de que Ben Cohen se opusiera a que Estados Unidos siguiera apoyando a Ucrania con fondos y armas.
No fue la primera vez que la empresa enfrentó críticas por sus posturas. La empresa también fue objeto de escrutinio cuando lanzó su sabor "El cambio se está gestando" en 2019, que abogaba por el derecho al voto. También ha apoyado abiertamente la iniciativa Black Lives Matter desde 2016.
Ben Cohen dirige y financia la Iniciativa del Poder Popular, un grupo que ha lanzado Eisenhower Media Network (EMN), un proyecto que brinda a los periodistas acceso a expertos militares, algunos de los cuales creen que Estados Unidos está proporcionando demasiada ayuda a Ucrania en su lucha contra Rusia.
Eisenhower Media Network se describe a sí misma como "un recurso independiente para periodistas" en su sitio web, donde ofrece opiniones expertas sobre la guerra en Ucrania. "El escandaloso gasto federal en la guerra de Ucrania no se tiene en cuenta en el debate sobre la deuda nacional... Es hora de pensar en suspender la financiación para Ucrania si no podemos permitírnosla", declaró Matthew Hoh, director asociado de este grupo.
Edward Erikson, director de campaña de Iniciativa del Poder Popular, declaró a Newsweek que la postura de Cohen es coherente con lo que ha creído durante los últimos 30 años. "Está a favor de la paz", afirmó Erikson. Ha sido muy claro al condenar el ataque de Rusia a Ucrania y su guerra de agresión, pero también ha sido claro al afirmar que Estados Unidos debe usar todo su poder para impulsar la diplomacia y poner fin al sufrimiento de Ucrania y los ciudadanos rusos lo antes posible.
El propio Cohen ha dicho “que Estados Unidos debería usar su poder para negociar el fin de la guerra, no prolongar la muerte y la destrucción suministrando más armas".
En julio pasado, de hecho Ben Cohen y Jodie Evans, cofundadora del grupo pacifista CodePink, fueron arrestados frente a la sede del Departamento de Justicia en Washington, D.C., por bloquear la entrada al edificio para protestar contra el procesamiento del gobierno estadounidense contra Julian Assange, editor de WikiLeaks. Cohen y Evans fueron arrestados en ese entonces mientras otros manifestantes coreaban consignas exigiendo la libertad de Assange, el australiano ya liberado.
"Es indignante. Julian Assange no es violento. Se presume su inocencia. Y, sin embargo, de una forma u otra, ha estado encarcelado en régimen de aislamiento durante cuatro años. Eso es tortura", declaró Cohen durante la protesta. "Reveló la verdad, y por eso está sufriendo, y... debemos hacer todo lo posible para ayudarlo y para preservar la democracia, que se basa en la libertad de prensa".
“It’s not a war, it’s a slaughter”
— Ben Cohen, co-founder of Ben & Jerry’s, slams the US for its support of Israel. pic.twitter.com/zaojHdPbI9
— Jackson Hinkle 🇺🇸 (@jacksonhinklle) March 30, 2025
Un enemigo del gran capital
Cohen también ha expresado con frecuencia su postura sobre temas de justicia social. En 2012, lanzó la campaña Stamp Stampede junto con Movement Resource Group, instando a la gente a escribir frases en billetes de dólar para impulsar un movimiento que busca eliminar el gran capital de la política. Los mensajes incluían: "Las corporaciones no son personas" y "El dinero no es libertad de expresión".
Como parte de otra campaña, ésta contra la corrupción gubernamental, Ben Cohen se instaló en junio de 2013 durante dos horas en una plaza de Nueva York para regalar a los transeúntes cientos de billetes de dólar en los que imprimió estos mensajes.
Ataviado con una camiseta en la que se podía leer “El sistema no está roto, está amañado”, Cohen estacionó en la plaza Union Square su “Amend-O-Matic StampMobile”, una furgoneta que arrastraba un gigante mecanismo de aspecto circense con el que imprimió diferentes lemas en billetes de dólar que después regaló a las personas.
La máquina, en la que se puede ver una gran careta de un hombre al que de manera intermitente le sale un fajo de billetes por la boca, va imprimiendo en los billetes de dólar lemas como “No utilizarse para sobornar a políticos” o “Imprime tu dinero para sacarlo de los políticos”.
Tres años después, cuando Cohen y Jerry Greenfield, fueron arrestados en una protesta en Washington, D.C. Los manifestantes apoyaban una gran variedad de causas, como la lucha contra el cambio climático, la justicia racial y el acceso a la atención médica. Cohen declaró a CNN que él y Greenfield protestaron para eliminar el gran capital de la política, alegando que las grandes corporaciones habían corrompido la política. Unas 300 personas más fueron arrestadas por protestar en el evento de 2016.
Ese mismo año, Cohen y Greenfield también apoyaron la campaña presidencial del Senador Bernie Sanders, el legislador independiente por Vermont, que hoy en día es una de las cabezas de un movimiento contra Donald Trump y la oligarquía que gobierna junto a él.
En 2023, la revista Forbes dio a conocer que Cohen fundó una nueva empresa: Ben’s Best Blnz (se pronuncia “blends”) (o B3) que vende cannabis y cigarrillos pre-armados en dispensarios de todo Vermont.
Mientras que Ben & Jerry’s donó alrededor del 8 por ciento de sus ganancias antes de impuestos a causas de derechos humanos, ambientales y de justicia social, Ben’s Best Blnz se estableció como una organización sin fines de lucro y donará el 100 por ciento de sus ganancias a organizaciones enfocadas en la financiación de empresas de cannabis propiedad de negros y en ayudar a que las personas sean liberadas de prisión por cargos de cannabis.