Irán declinó la oferta de Trump de un diálogo directo, pero deja abierta la vía de negociación a través de mediadores, exigiendo primero gestos de confianza.
MADRID, 30 Mar. (EUROPA PRESS).- El Presidente de Irán, Masud Pezeshkian, terminó por confirmar este domingo que rechazó la oferta inicial de negociación "cara a cara" presentada por el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aunque señaló que su país sigue dispuesto a conversar a través de mediadores.
Pezeshkian ha querido dar así por zanjada una cuestión planteada en su momento por el mandatario norteamericano, quien propuso a Irán que retornara a las conversaciones sobre la naturaleza de su programa nuclear y, en términos generales, a las negociaciones sobre cuestiones de interés bilateral y regional, antes de amenazar que, de lo contrario, podría adoptar una solución militar.
Trump dijo que había trasladado esta cuestión en una carta enviada al líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, respondida finalmente con una misiva iraní enviada a través de mediadores de Omán.
Este pasado jueves, el Ministro de Exteriores iraní, Abbas Araqchi, ya adelantó lo que Pezeshkian terminó por ratificar este domingo. "Nosotros jamás nos hemos negado a dialogar", aseguró el Jefe del Gobierno iraní en sesión con su Consejo de Ministros, recogida por la agencia de noticias semioficial iraní Mehr, "pero Estados Unidos terminó obstaculizando este proceso con sus constantes violaciones de los acuerdos y compromisos adoptados".
JUST IN:
🇮🇷🇺🇸 Iranian President, Masoud Pezeshkian says there will be NO negotiation with Trump:
"Now that you've started threatening us, I'll definitely NOT negotiate. Do whatever the hell you want." pic.twitter.com/MxahktAyt1
— Megatron (@Megatron_ron) March 11, 2025
Trump retiró de forma unilateral en 2018 a Estados Unidos del histórico acuerdo nuclear firmado tres años antes e impuso una batería de sanciones contra Teherán que llevaron al país a reducir sus compromisos con el pacto hasta la vuelta de Washington al cumplimiento de sus cláusulas. Desde su regreso a la Casa Blanca, el magnate republicano ha vuelto a activar una amplia batería de sanciones, algo criticado por el Gobierno iraní.
"Si Estados Unidos quiere restablecer la negociaciones", añadió, "que reconstruya primero su confianza a través de la rectificación de estas violaciones, porque es el enfoque de Estados Unidos el que marca el camino por el que discurren las conversaciones".